-¿Cómo surgió la idea del blog?
Con el nacimiento de nuestra hija enseguida nos dimos cuenta que más que ser un impedimento para hacer todo aquello que más nos gustaba, viajar y la montaña, su llegada era un aliciente y una nueva excusa para explorar el mundo con otros ojos. Fruto de estas experiencias publicamos varios guías de senderismo con niños, pero no dimos cuenta que había todavía muchas cosas por contar, y así es como nació WildKids.
-¿Alguna vez habéis tenido algún problema en alguno de vuestros viajes?
Nada digno de mención. Algún pequeño hurto, problemas leves de salud o algún que otro extravío de la mochila. El mundo sombrío e inseguro que dibujan los telediarios, salvo contadas excepciones, dista bastante de la realidad.
-¿Qué habéis aprendido de viajar?
Viajar nos enseña una y otra vez a romper con nuestra zona de confort, a pasar por encima de esos límites imaginarios que muchas veces el miedo propio y el de la sociedad nos imponen y, en definitiva, a ser más independientes, más flexibles, más curiosos y por supuesto más felices.
-¿Cuál es vuestra actividad en la naturaleza favorita?
Nos es difícil destacar una única actividad. Evidentemente, con la llegada de nuestra hija, la observación de insectos, el coleccionismo de piedras o la búsqueda de tesoros y castillos encantados ocupa un puesto destacado. Pero precisamente la naturaleza tiene esa gran virtud, la de ofrecer opciones para todas las edades y condiciones. Desde el senderismo, el geocaching o la orientación, hasta el barranquismo, el alpinismo o la escalada.
Nosotros intentamos practicarlos todos. Aprendiz de mucho, maestro de nada.
-¿Qué consejo les dirías a padres y madres que no se atreven a llevar a sus hijos a la montaña?
Nuestra experiencia nos dice que la clave para ir con los niños a la montaña está en la paciencia e imaginación de los padres. Muchas veces asumimos que los niños no están preparados para salir a la montaña, que se cansarán, que lloraran a la primera de cambio o que no será capaz de avanzar, pero nos equivocamos. No solo son los niños los que deben estar preparados, también, y de forma muy especial, los padres. Ir a la montaña con niños no debería ser únicamente ir a su lado. Siendo pacientes e imaginando y jugando junto a ellos, todo irá mejor.
-¿Cuál suele ser vuestro alojamiento más habitual?
La tienda de campaña nunca falta en nuestro equipaje por dos motivos. En primer lugar por la libertad y seguridad que nos da tener siempre a nuestra disposición un lugar donde dormir ante cualquier situación, especialmente en destinos donde la naturaleza está muy presente y la oferta de alojamientos suele ser más bien escasa, y en segundo lugar por economía.
-¿Tenéis en mente vuestro próximo destino?
Estos dos últimos años hemos estado explorando con nuestra hija los Alpes, en uno de los veranos más fríos que se recuerdan, e Islandia, que recorrimos en bicicleta. Ahora mismo estamos acabando de perfilar cuál será nuestra próxima “aventura”, pero lo que si podemos decir es que el bañador va a ser una prenda imprescindible.