Altea y Alrededores: Qué ver

¿Buscas un rincón de la Costa Blanca donde el tiempo se detiene? Altea y alrededores, con sus casitas blancas y cúpulas azules, te invita a un viaje sensorial. Imagina pasear por sus callejuelas empedradas, el aroma del mar acariciando tu rostro y el sonido de las olas como banda sonora.

altea y alrededores

El casco antiguo, un museo al aire libre. Adéntrate en un laberinto de callejuelas que te transportarán a otra época. La Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, con su cúpula azul cobalto, es el corazón de Altea. Desde su mirador, contemplarás unas vistas panorámicas que te dejarán sin aliento.

Alójate en un hotel en Altea con encanto para disfrutar de todas las comodidades. Además, tienen una zona wellness donde mimarse.

Playas para todos los gustos. Si prefieres la arena y el sol, Altea te ofrece una amplia variedad de playas. La Playa de la Roda, con su paseo marítimo lleno de vida, es perfecta para disfrutar de un día en familia. Para los amantes de la tranquilidad, las calas escondidas del Morro de Toix son un verdadero paraíso.

Altea, mucho más que sol y playa. Pero Altea no es solo sol y playa. Su oferta cultural es muy rica. Visita el Museo de Arte Contemporáneo, donde podrás disfrutar de exposiciones de artistas nacionales e internacionales. Y si eres amante de la naturaleza, no puedes perderte el Parque Natural de la Serra Gelada, un lugar ideal para practicar senderismo y disfrutar de la flora y fauna autóctona.

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Alrededores con encanto. Y si quieres explorar más allá de Altea, tienes muchas opciones. Benidorm, con sus rascacielos y su animada vida nocturna, está a un paso. Calpe, con su Peñón de Ifach, es otro destino imprescindible. Y si buscas tranquilidad, los pueblos de interior como Guadalest, con su impresionante castillo, te encantarán.

Sabores mediterráneos. No puedes irte de Altea sin probar su deliciosa gastronomía. Los restaurantes de la zona ofrecen una amplia variedad de platos típicos, como el arroz a banda, el pescado fresco y los postres caseros. Y para acompañar la comida, nada mejor que un buen vino de la tierra.

Altea, un destino para todas las edades. Tanto si viajas solo, en pareja o en familia, Altea tiene algo que ofrecerte. Es un lugar ideal para relajarse, disfrutar de la naturaleza, conocer gente nueva y crear recuerdos inolvidables.

Te propongo los siguientes planes para exprimir la Costa Blanca:

  • Alquila una bicicleta y recorre el paseo marítimo.
  • Haz una excursión en barco y descubre las calas más escondidas.
  • Visita los mercadillos locales y compra productos artesanales.
  • Disfruta de un masaje en uno de los muchos spas de la zona.
  • Asiste a una de las fiestas populares que se celebran a lo largo del año.

Espero haberte ayudado con esta información sobre Altea y alrededores.

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